Es común que tengas mil y un dadas al momento de empezar la identidad de tu marca, entre tantas cosas por hacer y definir, es difícil decidir por donde y como iniciar, sin embargo, existen algunos puntos clave que te ayudarán a tener claridad este proceso, simplemente tienes que contestarte las siguientes preguntas:
Aunque pueda sonar obvio, esta es una de las preguntas clave, ya que preguntándote esto no solo reconoces los productos y/o servicios que ofreces, sino que también te ayudara a definir el “giro” de tu negocio.
Entiéndase esta pregunta con el cómo te gustaría que sea percibida tu marca, seria o divertida, más formal o informal, o quizá irreverente, y seguir por esta línea
Recuerda el motivo por el cual decidiste nombrar tu marca de esa manera, quizá es un buen momento para replantearte el nombre, recuerda puedes jugar con diversos recursos como acrónimos o siglas
Será indispensable en este momento que comiences a definir los valores de tu marca, pues estos son los primeros conceptos con lo que esta debería asociarse.
Un error común es el de pretender venderle a “todo el mundo” y pensar que tu producto o servicio le irá bien a cualquiera, pero nada más alejado de la realidad, por ello es indispensable elegir un segmento o nicho a quién dirigirse